La pasta feta horneada está tomando el mundo de TikTok por asalto y es obvio por qué: es cremosa, con tomate y MUY deliciosa. Probablemente sea el plato de pasta más simple que preparará este mes y la recompensa es muy alta por un esfuerzo increíblemente bajo.
Es increíblemente fácil de hacer, sabrosa y luce muy bien. Se basa en un aperitivo griego, queso feta horneado. La primera mención de mezclar queso feta horneado con pasta fue popularizada por la bloguera finlandesa Jenni Häyrinen. Ella lo llamó uunifetapasta o pasta feta al horno. Aparentemente, la pasta feta es increíblemente popular en Finlandia porque un par de otros blogueros también escribieron sobre ella.
Los tomates cherry se mezclan con aceite de oliva y se colocan en una fuente para hornear con un pedazo de queso feta. Todo se hornea hasta que los tomates revientan, liberando sus sabores dulces y confitados. El queso feta se derrite y burbujea. Lo mezclas todo en una salsa rápida, agregas ajo picado, albahaca, pimiento rojo triturado y pasta. ¡Boom, la cena está lista!
Los sabores predominantes de esta pasta son el queso feta y el tomate, es prácticamente una pasta de dos ingredientes. Si no eres un gran fanático del queso feta, definitivamente puedes usar otro queso: el queso brie horneado, el queso crema o la ricota serían INCREÍBLES.
Ingredientes
2 racimos de tomates cherry o cualquier otro tomate
1/3 taza de aceite de oliva
8 oz de queso feta
9 oz de pasta de tu elección
2 dientes de ajo machacados
albahaca fresca picada
Preparación
Precalienta el horno a 400 °F. En una fuente para hornear, mezcla los tomates con el aceite de oliva y coloca el queso feta en el medio, girándolo para cubrirlo en aceite. Condimenta todo con sal y pimienta y hornea por 30 minutos.
Después de 30 minutos, sube el fuego a 450 °F y hornea hasta que el queso feta esté dorado de 10 a 15 minutos.
Mientras se hornea el queso feta, cocina la pasta de acuerdo con las instrucciones del paquete. Guarda 1-2 tazas de agua de pasta, luego escurre bien.
Cuando el queso feta y los tomates estén listos, retíralos del horno e inmediatamente añade el ajo y el pimiento rojo triturado, si lo usas. Revuelve todo hasta que los tomates y el queso feta se combinen en una salsa cremosa.
Incorpora la pasta escurrida hasta que esté bien cubierta y cremosa, agregando un poco de agua de pasta para que se afloje si está demasiado espesa. Prueba y sazona con sal y pimienta. Agrega un poco de albahaca picada y termina con pimiento rojo triturado.
Receta y Fotografías de: Steph and Mike vía i am a food blog
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